Raqfei: de lleno en el carnaval de Carliños Braun Minipimer
Cumeak, un despiste extraño me llevó de lleno al Carnaval Vomistar de Carliños Braun Minimiper o algo así.
Según pude constatar, se trataba de una especie de procesión como las de la santa semana, con un recorrido extrañamente alejado del centro de la ciudad (supongo que esta vez sí han pensado en la seguridad), pero con los mismos elementos: dos carrozas, una delante y otra detrás, en la de delante un representante del género masculino (un chamán o algo así) hablando a los fieles (los de debajo, los que bailaban al ritmo de la samba) en nombre de alguno de los dioses de este planeta. Supongo que habría, por tanto, miembros del Foro Español de [un modelo entre tantos de] la Familia, represtantes de la Conferencia Episcopal y otros seguidores fervorosos de la Cope, aunque creo recordar que todos ellos han arrojado brillantes críticas al citado Carnaval en su edición de la capital española, pero bueno.
Me gustó a medias. Reconozco que no estuve del todo a gusto (como tampoco lo estuve en la pasada santa semana), aunque la música me resultó molona. Creo que había demasiada gente y demasiado cani, según citaban otros miembros de la resistencia que me acompañaban. Fuentes oficiales indican que asistieron 200.000 personas, lo que me lleva a pensar:
1) Que sea verdad y, por tanto, también resulte verdad lo de las 166.000 personas de la manifestación a favor de la homofobia celebrada en Madrid hace justo una semana, retirando por tanto el contenido de mi artículo sobre este tema.
2) Que el que lo haya contado sea el mismo, con poco ojo a mi enteder.
3) Que lo haya contado otra persona, esta vez empleado de Mamena o Garrafone, las otras compañías de telefonía móvil.
Más tarde me encontré, por pura casualidad, a una compañera de estudios de la Universidad Intergaláctica de Tixomme,Maqi, a la que no veía desde hacía años. Lleva años en el planeta Tierra, y está absolutamente integrada. Me explicó, no obstante, lo difícil que resulta para una mujer soltera y con un hijo de apenas dos meses (ella logró un clon-hijo en uno de sus experimentos) encontrar y/o mantener un trabajo en una empresa privada. Un problema de difícil solución ante el cual las administraciones públicas maquillan la falta de ideas con vacíos planes que nunca que se llevan a cabo.
En fin, seguimos en contacto.
Según pude constatar, se trataba de una especie de procesión como las de la santa semana, con un recorrido extrañamente alejado del centro de la ciudad (supongo que esta vez sí han pensado en la seguridad), pero con los mismos elementos: dos carrozas, una delante y otra detrás, en la de delante un representante del género masculino (un chamán o algo así) hablando a los fieles (los de debajo, los que bailaban al ritmo de la samba) en nombre de alguno de los dioses de este planeta. Supongo que habría, por tanto, miembros del Foro Español de [un modelo entre tantos de] la Familia, represtantes de la Conferencia Episcopal y otros seguidores fervorosos de la Cope, aunque creo recordar que todos ellos han arrojado brillantes críticas al citado Carnaval en su edición de la capital española, pero bueno.
Me gustó a medias. Reconozco que no estuve del todo a gusto (como tampoco lo estuve en la pasada santa semana), aunque la música me resultó molona. Creo que había demasiada gente y demasiado cani, según citaban otros miembros de la resistencia que me acompañaban. Fuentes oficiales indican que asistieron 200.000 personas, lo que me lleva a pensar:
1) Que sea verdad y, por tanto, también resulte verdad lo de las 166.000 personas de la manifestación a favor de la homofobia celebrada en Madrid hace justo una semana, retirando por tanto el contenido de mi artículo sobre este tema.
2) Que el que lo haya contado sea el mismo, con poco ojo a mi enteder.
3) Que lo haya contado otra persona, esta vez empleado de Mamena o Garrafone, las otras compañías de telefonía móvil.
Más tarde me encontré, por pura casualidad, a una compañera de estudios de la Universidad Intergaláctica de Tixomme,Maqi, a la que no veía desde hacía años. Lleva años en el planeta Tierra, y está absolutamente integrada. Me explicó, no obstante, lo difícil que resulta para una mujer soltera y con un hijo de apenas dos meses (ella logró un clon-hijo en uno de sus experimentos) encontrar y/o mantener un trabajo en una empresa privada. Un problema de difícil solución ante el cual las administraciones públicas maquillan la falta de ideas con vacíos planes que nunca que se llevan a cabo.
En fin, seguimos en contacto.
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